Los regantes de Orellana eligen la localidad como sede

Así, la Comunidad General de Usuarios del Canal de Orellana, que agrupa a aproximadamente seis mil regantes a través de sus comunidades de base y gran parte del ámbito geográfico, se instalará de forma definitiva en el municipio dombenitense. Si bien, mientras se realizan los trámites para poder hacer efectiva la construcción de las nuevas instalaciones, el Consistorio pondrá a su disposición dos locales en el Vivero municipal de empresas ubicado en la calle Zafrillas. Ambos locales son contiguos de forma que pueden ser utilizados como una sola oficina.

Una apuesta más por el futuro de la ciudad, ha explicado la alcaldesa, que viene propiciado por el crecimiento exponencial de la entidad, «con el fin de apostar por lo que tenemos, ampliarlo y mejorarlo». Cabe recordar que esta comunidad de regantes se constituyó hace cinco años convirtiéndose, según explica Luis Gutiérrez, en la más importante de la región y la segunda a nivel nacional englobando alrededor de 58.000 hectáreas, gran parte de ellas, dentro del término municipal de Don Benito.

En términos económicos, todos los años «regamos con 500 millones de euros el conjunto de regadío de las Vegas Altas con lo que se alcanzan explotaciones privadas, industrias, comerciales, cooperativas… en definitiva, todo el sector del regadío y se convierte en el motor socioeconómico de la comarca y sitúa a Don Benito en uno de los polos económicos de la región».

En los terrenos que se adquieran se crearán unas instalaciones de 20.000 metros cuadrados que albergarán una oficina técnica con referente a nivel nacional y un referente en I+D, en una obra de más de 1.000 millones de euros, destacó el presidente.

Juan Diego Fuentes, por su parte, añadió que en el momento en el que se materialice la construcción de la Oficina Técnica, Don Benito albergará una modernización del regadío «sin precedentes, solo equiparable al Plan Badajoz y única a nivel no solo regional sino nacional».

Al respecto, indica, existen oficinas que trabajan con pequeñas extensiones de terreno, «pero no algo tan amplio» pues, las cifras que maneja el Canal de Orellana «multiplican por diez lo que se ha hecho hasta ahora mejorando la vida de los usuarios».